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19 may 2011

Voy a parafrasear a Thoreau: "más que amor, que dinero, que fe, que fama, que justicia... dame la verdad"



"Dos años en esta tierra, sin teléfono, sin piscina, sin mascotas, sin cigarrillos. La libertad suprema. Es un extremista, un viajero estético, cuyo hogar es el camino. Y ahora, después de dos largos años vagando, llega la gran aventura, la batalla definitiva para matar al ser falso interior,y salir victorioso de la revolución espiritual. Para evitar que la civilización le intoxique, decide huír, y adentrarse solo en estos parajes, perdido en la naturaleza salvaje"
Alexander Supertramp, mayo de 1992


Lo único que nos brinda el mar son golpes duros y, a veces, la posibilidad de sentirnos fuertes. Bueno, no sé gran cosa del mar pero si sé que aquí es así. Y también sé lo importante que es en la vida no necesariamente ser fuerte sino sentirse fuerte, medir tu capacidad al menos una vez, hallarte al menos una vez en el estado más primitivo del ser humano, enfrentarte solo a la piedra ciega y sorda sin nada que te ayude, salvo las manos y la cabeza.



No debería negarse que la libertad siempre nos extasió. Es asociada en nuestras mentes con un escape, de la historia y opresión y leyes y fastidiosas obligaciones. Libertad absoluta. Y la carretera siempre condujo al oeste.


La libertad y la simple belleza son demasiado buenas para dejarlas pasar.


10 may 2011

Annie Hall


Recuerdo a los profesores de nuestra escuela pública. Teníamos un dicho: Los que no saben enseñan, y los que no saben enseñar dan clases de gimnasia. Y, claro está, los que no sabían nada de nada, venían a enseñar a nuestra escuela.


"¿Conocen este chiste? Dos señoras de edad están en un hotel de alta montaña y dice una: Vaya, aquí la comida es realmente terrible. Y contesta la otra: Sí, y además las raciones son tan pequeñas... Pues, básicamente, así es como me parece la vida. Llena de soledad, miseria, sufrimiento, tristeza... Y sin embargo se acaba demasiado deprisa.

Otro chiste importante para mí es uno que generalmente se le atribuye a Groucho Marx, pero creo que fue Freud quien lo dijo en relación con el subconsciente. Y dice así, en paráfrasis: Jamás pertenecería a un club que tuviese a alguien como yo de socio. Ése es el chiste clave de mi vida adulta en cuanto a mis relaciones con mujeres. ¿Saben? Últimamente pasan cosas muy raras por mi cabeza, porque yo ya soy cuarentón y supongo que estoy pasando por alguna crisis vital. No sé. No me preocupa la vejez, no, no soy de esos, aunque me estoy quedando calvo de la coronilla, y eso es lo peor que se puede decir de mí. Sin embargo, creo que con la edad mejoraré. Sí. Creo que seré un ejemplar del tipo viril, calvo, digamos lo contrario de un distiguido canoso. A menos que no sea ninguno de los dos y acabe siendo uno de esos babeantes que con la bolsa de la compra al brazo entra en la cafetería, predicando el socialismo.

Annie y yo rompimos, y aún no puedo hacerme a la idea, sigo examinando metalmente las piezas de nuestras relaciones y analizando mi vida para averiguar dónde surgió el fallo. ¿Comprenden? Y no... Hace un año estábamos enamorados, muy enamorados y... No crean que soy un tipo fúnebre, tristón, y tampoco un depresivo. Yo tuve una infancia razonablemente feliz, creo... Me crié en Brooklyn, en la Segunda Guerra Mundial"



Yo creo que la vida está dividida en lo horrible y lo miserable. En esas dos categorías. Y lo horrible son los enfermos incurables, los ciegos, los lisiados... No se como pueden soportar la vida, me parece asombroso. Y los miserables somos todos los demás. Así que al pasar por la vida deberíamos dar gracias por ser miserables. Por tener la suerte de ser miserables.


"Yo intento hacer con las mujeres lo que Einsenhover ha estado haciendo al país, el sexo es lo más divertido que he hecho sin sonreír"

6 may 2011

Algunos hombres buenos

"Yo desayuno a 1000 metros de 15000 soldados cubanos entrenados para matarme y no voy a consentir que ninguna boquita de Harvard con su amariconado uniforme blanco venga a decirme como tengo que defender a mi país, ¿está claro?"


"
Vivimos en un mundo que tiene muros y esos muros han de estar vigilados por hombres armados, ¿quién va a hacerlo, tú? ¿Usted teniente Weinberg? 

Yo tengo una responsabilidad mayor de la que puedas calibrar jamás. Tú lloras por Santiago y maldices a los marines. Tienes ese lujo, tienes el lujo de no saber lo que yo sé, que la muerte de Santiago aunque trágica, seguramente salvó vidas y que mi existencia aunque grotesca e incomprensible para ti, salva vidas.
Tú no quieres la verdad porque en zonas de tu interior de las que no charlas con los amiguetes, me quieres en ese muro, me necesitas en ese muro.
Nosotros usamos palabras como honor, código, lealtad, las usamos como columna vertebral de una vida dedicada a defender algo, tú las usas como gag, y no tengo ni el tiempo ni las más mínimas ganas de explicarme ante un hombre que se levanta y se acuesta bajo la manta de la libertad que yo le proporciono y después cuestiona el modo en qué la proporciono. Preferiría que sólo dijeras gracias y que siguieras tu camino, de lo contrario te sugiero que cojas un arma y defiendas un puesto. De todos modos, me importa un carajo a que creas tú que tienes derecho. "